Sears es el reflejo de lo que le esta pasando a los grandes almacenes en Estados Unidos (como Gap) ya que sus ventas cayeron un 14 por ciento en el segundo trimestre de 2015, además de que sus tiendas Kmart han perdido más de seis millones de dólares desde el 2012, ante esta situación y tras un difícil temporada navideña, la empresa informó que cerrará 50 de sus puntos de venta estadounidenses ya que no están generando ingresos suficientes como para seguir manteniéndolos abiertos.
Esta situación no es nueva para el minorista, pues en 2010 anunció el cierre de entre 100 y 120 de sus sucursales, de los cuales 79 estaban ubicadas en Florida, Ohio, Michigan y Georgia.
Steven Azarbad, experto en compañías de retail señaló que “es difícil encontrar una razón por la que Sears y Kmart sigan existiendo en el entorno actual. Es difícil imaginar que alguna vez (Sears) fue un minorista de destino”.
“La temporada de ventas resultó ser difícil, con un clima templado y una intensa competencia, lo que deprimió los márgenes de ganancias y las ventas”, informó la empresa a través de un comunicado.