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En innovación, Walgreens es uno de los retailers referentes en sustentabilidad.
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En España, Mercadona lanzó un modelo eficiente de tienda.
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Hoy por hoy, el consumidor compra productos más sostenibles.
La sustentabilidad, los productos orgánicos y prácticas de consumo con un menor impacto ambiental son tendencias con mayor impacto en las tiendas minoristas.
En España, un gran ejemplo de tienda sostenible es el “modelo eficiente” de Mercadona, que no solo se diferencia de otros puntos de venta por tener nuevos materiales, colores, accesos y distribución de las secciones de la tienda, sino que cuenta con instalaciones ecoeficientes con una reducción de consumo energético.
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El supermercado Carrefour es otro ejemplo de sostenibilidad, visto que su estrategia de marketing apuesta desde una disminución del impacto ambiental de productos y servicios, promoción del consumo responsable hasta evaluación de proveedores sobre derechos humanos, por mencionar algunos ejemplos.
En el mercado estadounidense, Walgreens Boots Alliances es uno de los retailers que apuestan por la sostenibilidad. Según datos de la propia compañía, trabaja en mejorar el acceso a la atención médica, a través de programas de apoyo a pacientes con cáncer y reducir su huella de carbono.
Una de las innovaciones del retailer estadounidense es la instalación continua de sistemas inalámbricos de control de iluminación en sus tiendas, una sistema que le permitirá reducir a la tienda un 25 por ciento en el uso de energía.
Asimismo, Walgreens impulsa programas para expandir el reciclaje en tiendas, donde se generan la mayor parte de los desechos de la tienda.
En este sentido, las estrategias enfocadas en mejorar la vida de los consumidores responden a la preocupación del consumidor sobre su impacto en el medio ambiente.
Una investigación realizada por Center for Sustainable Business (CSB) de la Universidad de Nueva York muestra que una de las tendencias de consumo es la compra de productos más sostenibles.
Una encuesta muestra que los consumidores están dispuestos a pagar más por productos producidos de manera sostenible.