De acuerdo con el Instituto Vasco de Estadística (EUSTAT), las siguientes definiciones, es importante conocerlas para que conduzcan a la realización de mejores productos o procesos dentro de una empresa/marca.
Innovación de comercialización
Se trata de la implementación de nuevas estrategias o conceptos comerciales que difieran significativamente de los anteriores y que no hayan sido utilizados con anterioridad. Según EUSTAT, “debe suponer un cambio significativo en el diseño o envasado del producto, en el posicionamiento del mismo, así como en su promoción y precio”.
Sin embargo, excluye los cambios estacionales, regulares y otros cambios similares en los métodos de comercialización. Estas innovaciones conllevan una búsqueda de nuevos mercados, pero no cambios en el uso del producto.
Innovación de proceso
Por otro lado, este tipo de innovación consiste en la implantación en el establecimiento de una tecnología de producción nueva o sensiblemente mejorada, así como de métodos nuevos o sensiblemente mejorados de suministro de servicios y de entrega de productos. Según la firma, “el resultado debe ser significativo con respecto al nivel del volumen de producción, la calidad de los productos (bienes o servicios) o los costes de producción y distribución”.
Pero es importante que la innovación sea nueva para la marca. No obstante, es necesario que la marca sea la primero en introducir el proceso.
Innovación de producto
Finalmente, la innovación de producto trata de introducir en el mercado un bien o un servicio nuevo o sensiblemente mejorado con respecto a sus características básicas, especificaciones técnicas, software incorporado y otros componentes intangibles, finalidades deseadas o prestaciones.
En este caso, no importa que la innovación haya sido desarrollada por su establecimiento o por otro. Pero, la mera venta de innovaciones completamente producidas y desarrolladas por otros establecimientos no debe ser tenida en cuenta. Los cambios de naturaleza únicamente estética no quedan incluidos.