La consultoría en marketing es una labor necesaria para todas las organizaciones, que se ha venido desgastando en la medida en que no es efectiva, no trasciende y se queda en las palabras de consejería del consultor, sin generar emoción que favorezca la filiación y la credibilidad del cliente.
Más columnas de Irina Valencia:
Neuromarketing, la promesa que hay que saber hacer
El éxito en el marketing también depende de la historia
Aprenda a gestionar su canal de YouTube
En tanto que, la relación puede estar mediada únicamente por el dinero, creyendo que solo se trata de un pago por una estrategia, pero si el consultor no tiene claridad en el objetivo que persigue, su propuesta puede ser fatal, llevando a inversiones de dinero innecesarias, que sólo favorecen el desgaste del cliente y más cuando este desconoce acerca del marketing.
Así, la consultoría en marketing se convierte en un proceso transversal para las organizaciones, porque se necesita un entendimiento del entorno social y el sector económico, buscando orientar el marketing de la organización hacia la competitividad, optimizando todos los recursos, humanos, financieros, etc.
Pues aunque suene irrisorio, hay consultores en marketing que sólo buscan su propio beneficio, no optimizan recursos y finalmente terminan por plantear estrategias de gigantescas proporciones que no cumplen con el objetivo, lo hacen a su amaño, conveniencia y bolsillo, lo cual resulta desgastante para la organización, quien finalmente encontrará gastos y reprocesos en las estrategias.
No todas las empresas necesitan tener redes sociales, sitio web, inversiones en ATL, la ruta más sencilla para llevar a una organización al desastre, evitando que te vuelvan a llamar como consultor, es proponerle a todas lo mismo, creyendo que son las soluciones generales y divinas para todas las organizaciones a nivel mundial, pero hay algo peor y es estudiar las necesidades del cliente y proponer muy conscientemente, pero sin investigación; esto es un juego sin lógica. El consultor de marketing es un vendedor de conocimientos, pero su servicio debe trascender, ir más allá de las palabras y el planteamiento estratégico que no tiene medidor. Aquí, claves para hacer consultoría en marketing:
1. Convierta su servicio en un producto tangible: el ser humano está compuesto todo el tiempo por simbolismo, aproveche esto y no solo entregue a su cliente una asesoría o un acompañamiento para crear un plan de mercadeo, dele valor a su trabajo, al final de su consultoría entréguele a su cliente un manual de procedimientos para marketing, fórmelo y deje recordación de marca personal.
2. Haga hincapié en la investigación: este proceso no es un valor agregado, es su obligación, hágaselo saber a su cliente y entregue los resultados de la investigación de manera pertinente y clara, para que él considere que su información es valiosa y le puede dar continuidad a su uso.
3. Cobre lo que tenga que cobrar: no omita costos, no dañe el mercado y no regale su trabajo.
