Marketing social: Historias reales vs historias ficticias
La situación de las personas sin hogar se ha convertido en un serio problemas para los gobiernos y para ello han lanzado campañas de marketing social con las que busca erradicar esta situación y en conjunto con ONG’s se han dado a la tarea de hacer visibles a los invisibles de las calles, tal y como lo hizo Make Them Visible Foundation en Estados Unidos.
Retail marketing: Cajas de electrodomésticos que se vuelven muebles
Diariamente miles de personas en todo el mundo pasan la noche en las frías banquetas o en bancas de los parques, por ello muchos gobiernos han emprendido acciones para ayudar a las personas sin hogar, sin embargo no siempre son suficientes y ahí es cuando las marcas entran con campañas de marketing social tal y como lo hizo el minorista costarricense Gollo.
Marketing social que abrigó a los vagabundos y sus perros
De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (IMF), en Canadá hay poco más de 36 millones de personas de las cuales no todos tienen el privilegio de vivir bajo un techo y se ven obligados a vivir en la calle ya sea acompañados por otra persona o por sus mascotas y tienen que soportar temperaturas congelantes.
Marketing social: Vagabundos transformados en extras
El tema de las personas sin hogar (homeless o vagabundos) no es exclusivo de países tercermundistas o en vías de desarrollo, ya que tan sólo en Nueva York, una de las ciudades más ricas del mundo casi 60 mil individuos pasan la noche en calles, parques o refugios, por ello varias organizaciones han decidido apoyar a quien se encuentra en tan lamentable situación tal y como lo hizo The Volksbond, que los transformó en extras para películas o comerciales.
Campaña en contra de Abercrombie & Fitch
Estados Unidos.- Mike Jeffries, CEO de la conocida marca de ropa, acepta que sus prendas están diseñadas únicamente para la gente cool y reconoce que son elitistas y no cualquiera puede utilizar sus productos.
Curriculum Vitae en anuncios outdoor
Suecia.- Cerca de 700 personas sin hogar en Estocolmo vende la revista Situation para obtener algo de comida y un lugar donde pasar la noche, sin embargo cada vez es más difícil que la gente compre la publicación.