El marketing directo es una serie de estrategias que se realizan con la finalidad de propiciar una comunicación sin intermediarios a modo de sucitar una reacción de los clientes de una marca comercial.
En la actualidad, para tener éxito como empresa es imprescindible tener activas diversas cuentas en las redes sociales, al menos en las principales, como es el caso de Twitter.
El éxito de comunicación en Twitter, entre la cuenta oficial y las de los clientes, se consigue al mantener la cuenta activa, es decir, el perfil debe estar frecuentemente interactuando en línea. Para ello, hay que tomar en cuenta lo siguiente:
- Es muy importante publicar de manera constante. Dicha información siempre debe de relacionarse con temas afines a la marca.
- Postear twitts que resulten en verdad relevantes para la comunidad de seguidores
- También retwittear, pero en la medida de sólo hacerlo con aquellos mensajes que merezca la pena leer.
- Dar Me Gusta a las menciones directas o los twitts que promuevan a la marca.
¿Cómo responder a los comentarios negativos?
Lo sencillo es darle Me Gusta a un comentario amable de un cliente satisfecho y además resposponder para agradecer el gesto. Pero en el caso de los twitts que no demuestran buena actitud hay que actuar con cuatela, pues incluso quizá haya algunos que habrá que dejar esperar más tiempo para atender.
Es muy importante darle siguimiento a los comentarios, verificar que lo que se está criticando se arregle, así como asegurarse de que no se repitan las malas experiencias y claro, reconocer si se está fallando a los clientes.
Lo vital es no perder la fidelidad de los clienteas así como no dejar decaer la calidad de los productos o servicios de la marca.
El lenguaje debe de ser diplomático, además hay que ser breves y tener mucho cuidado de no generar más polémica.
Quizá no sea lo más adecuado que quien atienda los comentarios negativos no sean los becarios, sino alguien con mayor cargo pues ya tiene experiencia haciendo frente a situaciones delicadas. Lo mejor es arreglar el descontento porque las redes sociales pueden generar en breve un torrente de desprestigio.
