Para aumentar su rendimiento, para crecer, para incrementar su productividad, las empresas, de modo análogo a los deportistas, necesitan ayuda de un coach para lograr de modo óptimo sus objetivos. Sin embargo, existen distintos tipos de coaching y sus funcionalidades son muy diversas. En el mundo empresarial, uno de los más útiles es el organizacional y en las siguientes líneas te explicamos los motivos, así como también te mencionaremos cuál es su definición.
El coaching organizacional, de acuerdo con datos de EAE Business School, se puede definir como la herramienta cuya meta es transformar la organización de instituciones como empresas para que se aproveche su potencial, y el de sus colaboradores, al mismo tiempo de que también logren las metas que buscan.
Antes de mencionar otros aspectos importantes de esta herramienta vale la pena detenerse para una reflexión: ¿cuando una empresa necesita del coaching? La respuesta podría ser que básicamente siempre y en cualquier momento, puesto que no hace falta que una compañía esté en crisis para que requiera ayuda y asesoría de un experto.
Sin embargo, Meta Cosultec puntualiza que una empresa requiere de coaching cuando requiere lograr resultados perdurables y profundos, cuando desean desarrollar las habilidades de los colaboradores de la compañía y, sobre todo, cuando quiere realizar un cambio positivo en sus estructuras. Estos objetivos que hemos mencionado precisamente coinciden con los que tiene el coaching organizacional.
Por medio de la escucha activa, una buena investigación y análisis de la organización de la empresa y de sus colaboradores se puede echar a andar un plan de coaching organizacional, el cual consistirá en el trazado de estrategias y la fijación de acuerdos entre las distintas partes que conforman una compañía.
Sin embargo, este tipo de coaching no sólo se encargará optimizar las estructuras de una empresa y las relaciones entre sus colaboradores, sino que también buscará mejorar el ambiente del espacio de trabajo, por medio de una cultura empresarial efectiva.
