La última semana de noviembre de este 2017 nos ha sorprendido con muchos cambios en el gabinete presidencial. El más reciente de todos fue que José Antonio Meade Kuribreña dejó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Sin embargo, este jueves 30 se hace efectiva la renuncia de Agustín Carstens como gobernador del Banco de México (Banxico). ¿Quién ocupará su puesto? ¿Cómo se elige a su sucesos? ¿Qué impacto ha tenido esto en el peso? Te lo comentamos a continuación.
Este lunes a las 27 de noviembre, en punto de las 11 de la mañana, Enrique Peña Nieto, titular del ejecutivo mexicano, anunció la renuncia de José Antonio Meade a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. El puesto ahora es ocupado por Luis Antonio González Anaya. Junto a ambos comunicados se esperaba que Alejandro Díaz de León fuera nombrado como el nuevo gobernador del Banco de México; sin embargo, no se expresó nada al respecto.
De acuerdo con información de medios como Forbes México, se esperaba que dicho anuncio se realizara junto los otros. Sin embargo, la gobernatura del Banxico sigue vacante. Sexenio mencionó que existía la posibilidad de que Meade Kuribreña ocupara el puesto de Carstens; empero, en el discurso ofrecido por la presidencia de la República no se mencionó nada al respecto. Por lo tanto, la hipótesis de que el ahora ex Secretario de Hacienda sea el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para la presidencia, toma cada vez más fuerza.
Ante este escenario, El Economista reportó que la Bolsa Mexicana de Valores inició la semana con un descenso de 0.46% 90.30 puntos. Por su parte, Forbes México comentó que a causa del anuncio sobre el gabinete presidencial el peso ganó ante del dólar 9.40 centavos, respecto a la venta del día viernes.
Según información de El Economista, hay claras señales de que haya un reajuste en la tasa de interés, que aumentaría próximamente al menos 7.25%, de acuerdo con el medio. Noticia que tendrá que dar quien quede a cargo de la gobernatura del Banxico.
De mantenerse el avance del peso frente al dólar, esto repercutiría positivamente los los retailers que realizan pagos con dólares; sin embargo, el reajuste en la tasa de interés complicaría el panorama para algunas empresas.
