Casos como el de Cambridge Analytica y Cultura Colectiva, donde se hizo un uso inescrupuloso de los datos o se realizó incorrectamente su almacenamiento, han sacado a flote la necesidad de establecer qué sí y qué no pueden realizar las empresas al momento de trabajar con la información de las personas. Tomando lo anterior como punto de partida se puede considerar que la ética informática ha tomado gran importancia en la actualidad. Sin embargo, ¿para qué nos es útil? En las siguientes líneas abordaremos algunos de los puntos más importantes respecto a este tema.
La ética informática no sólo es una etiqueta que se le da a una empresa que pone algunos candados a la información del público, sino que es algo que se encuentra en sus valores y en su misión de manera intrínseca y que por ende debe guiar su actuar en todo momento. Esta disciplina sirve como una especie de guía moral para saber qué se puede hacer con la data y qué no.
En tanto que una guía para el correcto actuar respecto a la utilización y almacenamiento de la información, la ética informática nos ayuda a establecer normas e incluso sanciones para algunas de las situaciones que se podrían presentar en el campo.
En dado caso de que se llegue a presentar algún problema con el manejo y el almacenamiento de la información, la ética informática nos puede arrojar luces sobre la solución que se le puede dar a dicho problema, tomando en cuenta algunos de los principios axiológicos y morales fundamentales.
Cabe destacar que es necesario que las empresas, el gobierno y la sociedad civil entablen un diálogo sobre los principios fundamentales que tienen que ver con los temas éticos relacionados con el uso de los datos, siempre de manera consensuada, crítica y analítica.
