Imagina que vas con tu amigo de compras a su tienda favorita de ropa, entran, de repente la configuración del establecimiento cambia: mientras a ti te muestra camisas con estampados y jeans, a él le muestra playeras polo con bermudas. ¿Sería impresionante, cierto?
Bien, ahora traslademos esto a una página web o correo electrónico, recibir sólo ofertas de temas que te interesan, alineadas a las búsquedas que has realizado en el sitio de cierta compañía. Eso es el contenido dinámico, toda esa serie de aspectos de un sitio o listas de envío, que cambian en función a los datos del perfil de un visitante y su historial de interacciones.
¿Te suena familiar? Seguro, esto no es algo nuevo. Gigantes de la industria como Amazon, Adidas o Expedia lo hacen todo el tiempo. Sin embargo, existe todavía un rezago importante en la aplicación de estrategias centradas en el contenido dinámico, esto puede deberse a aspectos como desconocimiento sobre su uso o falta de infraestructura tecnológica que las soporte; pero una cosa es clara: quien no lo esté usando puede estar perdiendo una importante cantidad de clientes y ventas.
La razón es sencilla, vivimos en un mundo digitalizado y saturado de información, los usuarios son bombardeados por publicidad en todos los canales posibles: televisión, páginas web, YouTube, redes sociales y así podríamos seguir, por eso proporcionarles ese diferenciador que les haga sentir que nos importan o que como marca conocemos sus gustos e intereses nos llevará a generar ese lazo de lealtad, que los impulse a que si están buscando algún producto particular se acerquen a nosotros de manera proactiva.
Ahí radica la importancia del contenido dinámico, en su capacidad de ayudarnos a sacar provecho de la información valiosa que los lectores nos proporcionan acerca de sus intereses, preferencias o comportamientos, ayudándonos a crear para los seguidores una experiencia grata, al tiempo que nos permite guiarlos en su proceso de compra, brindándoles información útil y relevante en el momento que la necesitan.
De hecho de acuerdo con datos de Aberdeen Group, los correos electrónicos personalizados mejoran las tasas de clickthrough en un 14% y las tasas de conversión en un 10%. Esta estadística sólo nos reafirma que el futuro del marketing se encuentra en la personalización y en nuestra capacidad de adaptarnos a los gustos de cada uno de nuestros seguidores.