La esfera digital se ha convertido en la cuna de comentarios positivos y negativos, pues desde el auge de la web 2.0 los usuarios encontraron en ella el escaparate perfecto para hacerse notar. Lamentablemente muchos de los comentarios vertidos en Internet son racistas y lejos de fomentar la tolerancia o la convivencia avivan la discriminación.
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En este escenario, la organización Criola, en Brasil, desarrolló una campaña de Mercadotecnia social combinada con medios BTL para, si no acabar con el racismo en redes como Twitter o Facebook, sí evidenciar a los autores de comentarios racistas y sensibilizar al resto de usuarios sobre su comportamiento en la red.
La campaña se llama Racismo Virtual y consiste en colocar vallas y carteles en diferentes puntos de Brasil, donde se imprimieron grandes capturas de pantalla de los comentarios negativos vertidos en la red.
De este modo se ponen en evidencia insultos y vejaciones, así como el impacto que pueden tener estos comentarios en la vida privada de las personas afectadas.
Hay que destacar que por respeto a los usuarios que insultaron en Internet, la organización decidió no poner sus rostros ni nombres. En lugar de ello publicó: “Omitimos los nombres y las caras de los autores porque no tenemos la intención de exponer a nadie. Sólo queremos educar a la gente para que, en un futuro, piense en las consecuencias antes de la publicación de comentarios racistas”.
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