El consumo se fue convirtiendo en una ola de violencia para el entretenimiento y el negocio lucrativo de delincuentes que amenazan las mejores prácticas del mercado. Muestra de ello, son los primeros videos snaff que comenzaron su boom en los años 90 y hoy son frecuentes en Internet. La película española de Alejandro Amenábar, “Tesis”, fue la primera en tocar este preocupante fenómeno.
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Los videos snuff no son un fenómeno de consumo que surgió con la generación de la Internet, pues desde que existía un mercado pirata de películas en formatos caseros, este consumo tuvo un primer boom. Sin embargo, su impacto mayor llegaría con las redes sociales y la fácil reproducción, difusión y venta de estos macabros productos.
Se trata de un género cuyo target es muy variado, pero está dirigido a ciertos clientes que gustan ser espectadores de actos violentos reales a través de una grabación. El fenómeno ha generado un mercado delictivo prácticamente imposible de frenar, ante el cual, tanto la mercadotecnia como el BTL tendrían que poner candados para protegerse y proteger a sus clientes.
La película “Tesis” de Alejandro Amenábar, se anticipa a este fenómeno:
1. Vislumbra un mercado para este tipo de productos violentos que ve en el asesinato y la tortura una manera de saciar sus necesidades de consumo.
2. Anticipa una sociedad juvenil involucrada en la creación de estos macabros productos o en la lucha contra su mercado.
3. Se adelanta al interés académico por estudiar este fenómeno, pues Angela, la protagonista, realiza su tesis sobre el tema. De ahí el nombre del polémico filme.
4. Anticipa una era plagada de violencia audiovisual.
5. Revela la indiferencia de las autoridades y de la sociedad ante la existencia de las snuff-movies.
