No solamente las marcas o retailers aplican el experiential marketing, (disciplina derivada del below the line), para “consentir” a sus clientes, también instituciones como las universidades realizan campañas para fomentar que más personas quieran estudiar con ellos o para incentivar a los que ya están inscritos.
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Un claro ejemplo es la acción que implementó la Universidad Estacio de Brasil, que reconoció el apoyo de toda la familia de una estudiante, pues ha sido la primera en graduarse y por ello la institución educativa decidió no sólo celebrarla a ella sino a todos los que la han apoyado económica y emocionalmente.
Esta campaña consistió en otorgarle un diploma especial a cada miembro de la familia, desde la abuelita, los sobrinos, hasta la hermana y la mamá de la graduada, ya que la apoyaron de todas las maneras posibles durante sus estudios.
Con esta acción de experiential marketing, la Universidad Estacio demostró que teniendo un buen storytelling se pueden hacer campañas efectivas que conmuevan a los espectadores y logren reforzar el engagement con ellos.
