En definitiva, todos los directores de mercadotecnia quisieran tener presupuestos de millones de dólares para poder realizar todas las acciones de marketing que se le vinieran a la cabeza y que, por supuesto, tuvieran un impacto positivo en los indicadores que busca mejorar. Sin embargo, esto muchas veces no es posible y se cuenta con una cantidad limitada de dinero para poder hacer ciertas estrategias y campañas. Por este motivo, muchos directivos buscan optimizar sus recursos para obtener buenos resultados, cantidades considerablemente limitadas de dinero. Una de las estrategias que sobre sale al respecto es el clienting, sobre el cual te hablamos en las siguientes líneas.
Sitios como Mecalux e Innovación Factory Institute, el cliente se puede definir como las acciones que se realizan para generar lealtad de los clientes hacia una determinada marca, por medio de actividades sistemáticas, las cuales tienen como finalidad incrementar positivamente la percepción de valor relacionada con el servicio que ofrecen.
Hay una peculiaridad muy importante que debemos tener en cuenta con el clienting: no sólo se trata de generar lealtad con cualquier cliente, sino que, a partir del estudio de datos e información, se puedan seleccionar estratégicamente aquellos con los que se pueda establecer una relación más provechosa, por ejemplo, un lazo mucho más duradero o que haya un mayor engagement que otros.
Como hemos mencionado arriba, para trabajar con el clienting, es importante, en primer lugar establecer una base de datos con información de los clientes de una marca. Posteriormente se estudiará la información con la finalidad de saber cuál se ajustan mejor a la relación estratégica que ya hemos mencionado. Finalmente se establece el plan de acción para poder generar un lazo de lealtad entre ellos y la firma.
El clienting, al ubicar a los clientes con a los que se quiere llegar, es posible optimizar los recursos, con la finalidad de forjar el lazo de lealtad con un presupuesto cerrado.
