De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en todo el mundo hay alrededor de 50 millones de personas que padecen epilepsia y estudios recientes demostraron que hasta un 70 por ciento de los niños y adultos diagnosticados con esta enfermedad pueden tratarse con éxito (es decir, tener sus convulsiones completamente controladas) con fármacos anticonvulsionantes.
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Sin embargo, muchos padres con hijos epilépticos señalan que una de sus mayores preocupaciones son los ataques de convulsiones por la noche, pues en muchos casos no hay forma de prevenirlos o estar al pendiente de cuando ocurren.
Por tal motivo, la Fundación de Epilepsia de Estados Unidos lanzó una campaña de marketing social para que los padres prevengan convulsiones nocturnas y para ello creó una almohada inteligente, pues bien instalado un sensor que monitorea las ondas cerebrales y alerta cuando hay cambios que anteceden a un ataque epiléptico.
Para ello los padres tienen que instalar una aplicación en sus celulares que va enviando informes sobre el ataque y a gravedad de este, además de que tiene registrado el historial clínico del niño y el médico que lo atiende.
La almohada fue nombrada como “Sleep Sentry” (Almohada Centinela) y fue creada con la ayuda de la Miami Ad School:
