Ya en el 2013 Merca2.0 realizaba una serie de artículos tratando el tema, uno de los más sobresalientes es en el que se presentan 3 definiciones, las cuales fueron aportadas por expertos de talla internacional. El que más me gusta es la definición de Dan Greenberg, CEO de Sharethrough, describiéndola como “un tipo de media que está construido dentro del diseño visual actual, en donde los anuncios son parte del contenido”.
Con el paso del par de años que dejamos, este tipo de herramienta continuo con su aceptación y por tanto su empleo, es importante mencionar que existen dos formas que han adquirido fuerza, por un lado el “inbound marketing” y por otro el “branded content”, el primero con la intensión de generar lideres, seguidores y ventas, el segundo con el firme propósito de engendrar contenidos para las marcas.
Jesús Hernández Cuellar, un periodista especializado en medios, generó un artículo bastante concienzudo para mostrarnos las luces y las sombras de este tipo de publicidad, nos revela por ejemplo el retorno de la fuerte relación entre comunicación y publicidad, así como la creciente ola de jóvenes y empresas inexpertas que ofrecen el servicio sin ni siquiera tener en su haber un palmo de publirreportajes o informerciales.
Por lo anterior, vaticino que el 2016 sin lugar a dudas es el año de la publicidad que se mimetiza con el contenido para hacer del mismo un alimento en lugar de solamente ser un bien informativo accesorio para la vida de las personas. Les comparto algunos puntos que debe de tomar en cuenta cuando se desarrolle este tipo de marketing.
- De lectores a radioescuchas, luego de televidentes a internautas, por tanto debemos saber que las personas han esta sufriendo cambios en la manera en la que se acercan y disfrutan el contenido.
- “Contenido patrocinado” versus “nadie sabe, nadie supo”, según varios autores y agencias, es conveniente que este tipo de publicidad presente emblemas de estar pagados, sin embargo, lo que es un dilema ético para unos, al omitirse, es lo verdaderamente novedoso para los tiempos actuales.
- Además es una forma de refrescar el desencanto por conectarnos con las marcas (que son muchas y muy similares), con la información que estas generan y con la saturación de ofertas.
- Al parecer también es un retorno a la credibilidad de los liderazgos de opinión para comenzar con ser más selectivos con aquellos que lograron engrandecerse por medio su influencia, convirtiéndose en mercenarios del entretenimiento, de los espacios publicitarios y de un sentido hueco de la opinión.
