En un afán por enaltecer la labor de los caficultores chiapanecos y ampliar su oferta para los amantes del café, Starbucks apostó por una nueva presentación que destaca por sus notas cítricas de limón y el toque de dulzura de la almendra.
El empaque es mucho más artesanal, precisamente para poner en alto el nombre de los caficultores antes mencionados.