El día de hoy la Suprema Corte de Justicia de la Nacional (SCJN) discutirá y definirá si las etiquetas de packaging de alimentos procesados habrán de cambiar en su parte frontal.
La discusión y deliberación llevada a cabo en la SCJN deriva de un amparo presentado por la organización “El Poder del Consumidor” en el año 2015.
Dicho amparo afirma que el etiquetado de este tipo de productos no es del todo inteligible para la mayor parte de los consumidores en México, además de resultar incluso engañoso sobre los porcentajes de azúcar, sodio y otros ingredientes que se aprecian en la parte de enfrente del packaging.
Para 2016, un juez de Distrito determinó que las etiquetas mexicanas sí atentaban contra el derecho a la salud e información de los consumidores, resolución que fue impugnada por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Según dicha organización, las etiquetas del packaging de alimentos procesados fueron introducidas por las propias empresas fabricantes, sin antes consultar a instituciones de salud para que valoraran la pertinencia del contenido informativo de las mismas.
De acuerdo con una publicación del Instituto Nacional de Salud Pública, se afirma que para el desarrollo de la las etiquetas que actualmente tienen distintos packaging, no se llevó a cabo ninguna consulta a expertos académicos, antes de su diseño e impresión.
Ante este amparo, empresas como Bimbo y Jumex, integrantes del Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico), no están de acuerdo en esta medida.
Información del Departamento de Investigación de InformaBTL, revela que 58.6 por ciento de los consumidores en México ven el diseño e imagen de un packaging como un elemento que atrae su atención.
Ineficiente el etiquetado de alimentos procesados en México
A inicios de este año, el doctor Simón Barquera Cervera, investigador y director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud (Cinys), dijo que la información nutrimental en un packaging de alimentos en México es escasa o deficiente.
Agregó que el hecho de no tener datos sobre el porcentaje calórico, así como de sodio y grasas saturadas en la parte frontal del packaging, contribuye a malas desiciones sobre los productos a adquirir, ya que de saberlo podrían elegir otras opciones menos dañinas para su salud.
