El manejo de los copies en el mundo del diseño y del marketing son de los elementos más importantes son los famosos “Call to Action”.
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La idea central es comunicar y llevar al consumidor de la mano para que, como su nombre lo dice, lleve a cabo una acción específica.
Personalmente creo que todo comunica: un logo, una leyenda, un código de barras, un empaque. La idea central es que todo sea parte de un gran todo que comunique en conjunto. Así, y dependiendo del producto a diseñar, cada texto que es parte de algún tipo de diseño debe de estar friamente calculado y construír algún elemento específico; eso nos lleva a que cada texto tiene un diferente objetivo, ya sea de comunicación, de venta o de vínculo con el consumidor.
Esto parece ser claro y sencillo, pero no lo es. Dependiendo del medio a usar y el objetivo específico, hay que “diseñar” textos que estén alineados a la comunicación corporativa, los objetivos de marca y por si fuera poco, generar vínculo con el usuario. Fácil no parece.
Dentro del ámbito del diseño, los copies más difíciles me parecen los de los famosos banners para internet. ¿Por qué? Pues porque tienen muchísimas restricciones, y que conste que no hablo de las restricciones técnicas, sino de las características del medio: animación rápida, pocos segundos de lectura y muchísima oportunidad de perder o ganar un click. Y pareciera que pocos entiende que un banner tiene que ser claro y conciso para poder generar un click. A esto hay que agregarle el diseño que muchas veces no ayuda.
Yo pregunto: ¿de verdad pueden leer estos call to actions? El click, ni siquiera lo cuestiono.
Tal vez los ejemplos hablen por sí solos.
