En un aeropuerto canadiense ocurrió un “milagro de Navidad”. Organizada por la aerolínea WestJet, una asombrosa activación BTL tuvo lugar en un espacio tan restringido como un aeropuerto: Santa Claus concedió los deseos de decenas de turistas.
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La campaña se llamó “Twas the night before Christmas”, y al igual que el popular poema homónimo de Clement Clarke Moore, Santa Claus llegó a repartir regalos… personalizados.
Previo al despegue de un vuelo de Toronto a Hamilton, un Santa virtual preguntó a los pasajeros qué deseaban para Navidad. Durante el viaje, un equipo de 150 empleados de WestJet se encargó de comprar cada uno de los obsequios, que fueron repartidos en la banda de equipaje y que abarcaron desde tablets hasta pantallas planas.
Un video de la campaña puede verse en la página de WestJet, donde se aprecia el proceso completo de la activación BTL que involucró cinco equipos trabajando a contrarreloj, quienes hicieron posible el “milagro” de Navidad.
A la fecha, el video lleva más de un millón 300 mil vistas.
