A pesar de que no todos los países tienen las mismas condiciones para desarrollar el comercio electrónico en sus economías, aun así hay avances en esta materia. Tan solo en México las tiendas en línea registraron ventas al por menor de 74.12 mil millones de dólares en 2016, según datos de Euromonitor.
Es un sector que se encuentra en constante crecimiento, principalmente en México. Sin embargo, cadenas como Walmart han invertido importantes cantidades de dinero al desarrollo de este sector. En 2016, el retailer invirtió 14,700 millones de pesos en 2016, 17 por ciento más que en 2015. De igual manera, destinó una parte de sus inversiones a remodelaciones y mantenimiento de sus establecimientos con el fin de mantener la calidad para los clientes.
Mientras que retailers como Soriana también han fortalecido su presencia en el mercado online en México. En 2016, amplió sus catalogo de productos, y sumó nuevas modalidades de pago en su portal de venta en línea.
No obstante, uno de los principales retos que tiene el comercio electrónico en México es la seguridad. De acuerdo a información de Vestan Corporation, los fraudes electrónicos representan pérdidas de entre el 7 por ciento y 10 por ciento de las ventas anuales.
Los fraudes electrónicos pueden ser desde acceso ilícito a sistemas informáticos, falsificación informática o el robo de credenciales a través de copias de un sitio o también llamado: phishing. Su característica especial es que se ligan portales falsos a sitios web de marcas o empresas en los cuales se puede llevar a cabo algún tipo de fraude.
Entre los principales casos de phishing podemos encontrar los siguientes, según Welivesecutiry:
Phishing redirector
Esta técnica es utilizada en campañas masivas, por lo tanto si bien estos ataques tienen un muy bajo porcentaje de víctimas, existe una gran cantidad de usuarios afectados y por ende credenciales comprometidas.
Smishing SMS
Los delincuentes se hacen pasar por entidades conocidas y envían un mensaje de texto alertando a la víctima de que ha ganado un premio. De esta manera, las víctimas deben responder con algún tipo de código o número especial para validar su falso premio.
Spear phishing
Este tipo de phishing está dirigido a personas o grupos reducidos. Por tanto, las campañas son mucho más personificadas y con un porcentaje mayor de víctimas.