En un movimiento que consolida su trayectoria como líder en responsabilidad corporativa, Michelin México y Centro América (Región Central) anunció su adhesión al Pacto Global de las Naciones Unidas, la iniciativa de sostenibilidad empresarial más grande del mundo. Con esta decisión, la compañía francesa —reconocida por su innovación en movilidad— reafirma su alineación con estándares internacionales en derechos humanos, prácticas laborales justas, protección ambiental y lucha contra la corrupción.
El Pacto Global, lanzado en 2020, congrega a más de 18,000 empresas en 67 países bajo un mismo propósito: acelerar el desarrollo sostenible a través de acciones corporativas concretas. Al integrarse a esta red, Michelin se compromete formalmente a implementar los Diez Principios universales del Pacto y a contribuir activamente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, que buscan garantizar equidad, justicia y preservación del planeta.
Una alineación estratégica con los valores globales
Para Michelin, esta adhesión no es un gesto simbólico, sino una extensión natural de su filosofía corporativa. Desde su fundación, la empresa ha priorizado prácticas éticas en sus operaciones, desde la fabricación de neumáticos hasta su cadena de suministro. Su enfoque incluye el respeto a los derechos humanos, la promoción de condiciones laborales dignas, la reducción de su huella ambiental y la transparencia en sus procesos.
Matthieu Aubron, CEO de Michelin México y Centro América, destacó:
“La sostenibilidad es un pilar fundamental en nuestra estrategia corporativa. Nos enorgullece unirnos al Pacto Global y formar parte de una comunidad global comprometida con la construcción de un futuro más equitativo y sostenible”.
Por su parte, Carla G. Salamanca, Gerente de Sostenibilidad de la región, agregó:
“Ser parte del Pacto representa un paso significativo en nuestra misión de impulsar prácticas empresariales responsables. En Michelin, nos comprometemos a respetar y promover los derechos humanos, garantizar condiciones laborales justas, proteger el medio ambiente y luchar contra la corrupción en todas sus formas”.
Los diez principios del Pacto global de la ONU
La integración al Pacto Global de la ONU implica que Michelin operará bajo un marco de acción estructurado en diez pilares:
- Protección de derechos humanos: Asegurar el respeto a las garantías fundamentales en todas sus operaciones.
- Evitar complicidad en violaciones: Garantizar que ni la empresa ni sus socios vulneren estos derechos.
- Libertad sindical: Apoyar la afiliación y negociación colectiva de sus colaboradores.
- Eliminar el trabajo forzado: Erradicar cualquier forma de coerción laboral.
- Erradicación del trabajo infantil: Velar por entornos libres de explotación infantil.
- No discriminación: Promover la igualdad en empleo y oportunidades.
- Prevención ambiental: Adoptar medidas proactivas para minimizar impactos ecológicos.
- Responsabilidad ambiental: Fomentar iniciativas que protejan los ecosistemas.
- Tecnologías sostenibles: Innovar con soluciones respetuosas del medio ambiente.
- Combate a la corrupción: Rechazar sobornos, extorsiones y prácticas ilegales.
Estos principios no solo guiarán las operaciones internas de Michelin, sino que también influirán en su cadena de valor, desde proveedores hasta clientes finales.
Movilidad sostenible
La adhesión al Pacto Global de la ONU refuerza el propósito central de Michelin: “Ofrecer movilidad sostenible para todos”. Este objetivo se materializa en iniciativas como la producción de neumáticos con materiales reciclados, la reducción de emisiones en sus plantas y la promoción de economías circulares. En México y Centroamérica, la compañía ya ha implementado programas para optimizar el uso de agua y energía, así como campañas de reforestación en comunidades aledañas a sus operaciones.
Un legado que inspira
Al unirse a una red global de empresas responsables, Michelin no solo consolida su liderazgo en la industria automotriz, sino que también establece un precedente para otras organizaciones en la región. Su compromiso demuestra que la rentabilidad y la sostenibilidad no son conceptos opuestos, sino complementarios.
En un mundo donde los consumidores y reguladores exigen cada vez más transparencia y acción climática, decisiones como esta no son opcionales, sino esenciales. Michelin, con más de un siglo de historia, entiende que el futuro de la movilidad —y del planeta— depende de que las empresas asuman su rol como agentes de cambio.
Con este paso, la compañía no solo avanza hacia sus metas corporativas, sino que contribuye a un legado colectivo: un mundo donde los negocios prosperan sin comprometer el bienestar de las personas ni los recursos naturales.
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