Hay que admitirlo, ¿quién no ha sentido alguna emoción al ver o escuchar la palabra GRATIS?
Una colaboradora un día me contó que de compras con su esposo, entraron a una tienda deportiva en la que iban exclusivamente a buscar un par de tenis para cada uno. Sin embargo, al llegar a la caja, el empleado les dijo que tenían una promoción en la que por cada mínimo de compra se llevarían GRATIS una mochila.
Sin dudarlo, aguardaron su pago para seguir comprando más artículos y así poder llevarse dos mochilas GRATIS; una para cada uno. Siendo así, no solo salieron llenos de felicidad con un par de tenis, sino con dos chamarras y una gorra extra. Ah, y sus dos mochilas de regalo, por supuesto.
Sí, tal vez pienses lo mismo que yo en ese momento: ¿gastaron de más solo por llevarse dos mochilas GRATIS? La verdad no puedo juzgar su historia, pues todos hemos caído en más de una ocasión en la seducción de esa palabra, ¿cierto?
Puede que hayan gastado más dinero del que tenían contemplado al entrar a la tienda, pero la oportunidad de acceder a esos regalos que no esperaban los llenó de una extraña emoción y felicidad. Y es que, a todos nos gustan los regalos, y las marcas y negocios lo saben.
Pero, ¿por qué la palabra GRATIS es tan atractiva? Psicológicamente, como consumidores, nuestra mente cree que es una forma de “ganarle” al sistema. Y no importa si en realidad ese producto o servicio “de regalo” no lo fue totalmente de esa forma, pues nuestra cabeza lo interpreta como una victoria personal.
Por lo tanto, el uso de esta palabra en un sinfín de estrategias sigue siendo una táctica infalible. Ya sea con la entrega de muestras gratis en la compra de tal producto o en anuncios web que sirven como ganchos para atraer a los consumidores a descargar algún contenido de valor para ellos a cambio de suscribirse y conseguir sus datos de contacto.
Además, el dar algo “gratis”, como un producto, aumenta automáticamente la percepción positiva del consumidor hacia él. Esto, porque mentalmente le añade un valor extra a ese “regalo” que ha conseguido.
Por ejemplo, diversas marcas han descubierto que el dar muestras gratuitas, hacen que el producto gane mayor valor entre los consumidores. Por lo tanto, a pesar de ser una estrategia de la “old school”, sigue dando frutos atractivos a las empresas.
¿Tú la has aplicado esta táctica alguna vez en tu empresa? ¿De qué forma? A través del marketing digital pueden crearse campañas realmente atractivas en las que, la palabra GRATIS, tan solo sea una pequeña parte del valor que tu marca puede brindar y la calidad de tu producto o servicio sea lo verdaderamente importante.
¿Cómo puedes lograrlo? Te comparto mi correo para platicar sobre ello e idear la estrategia ideal para tu tipo de negocio: [email protected]
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