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Iglesias, tan similares a una empresa transnacional

Omar Rangel / Posadas
Hablando específicamente de las religiones que predominan en México (cristianismo: católicos, evangélicos...), es aquí donde empezamos a encontrar similitudes con una empresa.

¿Qué es una organización? Se le denomina de esta forma a un grupo de dos o más personas que están unidas con un mismo fin, por ejemplo: dependencias de gobierno, asociaciones civiles, grupos de alcohólicos anónimos, compañías de baile, bandas de música, equipos de futbol, empresas/negocios, iglesias (sí, leíste bien, dije Iglesias), etc.

Pero… ¿Cómo opera una Iglesia? Hablando específicamente de las religiones que predominan en México (cristianismo: católicos, evangélicos…), es aquí donde empezamos a encontrar similitudes con una empresa.

Cuentan con una estructura organizacional, hay una cadena de mando, es decir, existe una línea de autoridad comprendida de los niveles más altos (estratégicos) a los más bajos (operativos). Indica la dirección en la que se ejerce la autoridad y las políticas de la organización. También cuentan con un tramo de control definido; este hace referencia a la cantidad de personas que un mando alto puede dirigir de manera eficaz y eficiente.

Aunque no todas, algunas cuentan con un “consejo de administración” para toma de decisiones, supervisar, vigilar acciones específicas, etc. El nombre de esta área puede variar dependiendo de cada denominación religiosa. Es una especie de candado que ata las manos de quien esté al mando para evitar actuar con alevosía y ventaja.

¿Y qué hay con los reglamentos?

Cada organización (La Iglesia Católica; El Concilio Nacional de Asambleas de Dios A.R.; La Convención Nacional Bautista de México A.R., por mencionar algunas) cuenta con una constitución y/o reglamento a nivel nacional, de manera que las iglesias en cada estado, ciudad o municipio, se rigen a través de él.

En perspectiva con una compañía, esto sería el equivalente a ser una matriz con dependientes o filiales distribuidas en toda la República Mexicana.
Es posible que en cada región se tenga además un reglamento interno exclusivo para ese sector, pero jamás podrá estar por encima de los lineamientos nacionales.

¿Quién “contrata” a la gente?

No existe el área de Recursos Humanos como tal; sin embargo, hay cargos cuyas funciones son similares: apoyar a los miembros, coordinar a los responsables de áreas, programar actividades, etc. Cada cargo exige cumplir con requisitos particulares, por ejemplo: trayectoria, nivel de estudios teológicos, buen testimonio, entre otros; de manera que no cualquiera puede formar parte… Similar al proceso de selección de personal en una empresa.

Dinero, plata, cash, money

Cada organización tiene un fin específico, por ejemplo: en los negocios siempre será generar dinero a través de la compra / venta / transformación de productos o servicios; las asociaciones civiles tienen fines educativos, culturales, deportivos, de divulgación, entre otros, sin ánimos de lucrar; las iglesias ofrecen consejería y guía espiritual.

Aunque con objetivos diferentes cada una, las une el dinero. Sin capital ninguna organización puede sobrevivir. El dinero es esencial para pagar servicios básicos: agua, luz, mantenimiento a instalaciones o equipos, compra de insumos y un sinfín de cosas que ayudan a desempeñar de forma óptima las tareas de cada puesto en las organizaciones.

No te confundas, las iglesias sí necesitan dinero; sin embargo, su fin no es generar riqueza. Las ofrendas y diezmos son parte de la doctrina. Aquí entran en juego las convicciones y madurez espiritual de cada persona respecto a la fe que profesa.

Sueldos, necesarios para sobrevivir

Ser cura, pastor o guía espiritual es un trabajo demandante que no tiene horario fijo, puesto que las emergencias se presentan de forma repentina. La Biblia como regla de fe y conducta del cristianismo, estipula en 1 de Corintios 9:13-14 que quienes se dedican a los menesteres espirituales, vivan de ello.

Así como el dueño de la empresa o negocio no figura en la nómina, sí vive y come de las ganancias generadas por la sociedad. No suelen tener horarios fijos y están metidos al 110% para sacar adelante a la compañía, expandir el negocio… tal como lo hace una iglesia.

No es fácil navegar un buque

Pocas son las diferencias entre una empresa y una iglesia. Tienen una estructura organizacional similar y operan de formas parecidas. Ambas requieren de personas para el trabajo operativo y administrativo.

En las iglesias también hay diferencias entre compañeros, nepotismo; en casos más fuertes, corrupción o escándalos sexuales y toca lidiar con ello… igual que en una gran empresa. No hay organización que no tenga problemas, tanto empresas como iglesias los tienen, y de todo tipo.

Es una labor loable la que hacen los representantes de las organizaciones religiosas, ya que una mayoría está ahí por un llamado especial, tratando de serle fiel y agradarle a aquel que los tomó por soldados…

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